Según el informe de la DNCD, el agente Carlos José Aquino Castillo fue expulsado de la institución al determinarse que recibía RD$3 mil en efectivo por cada furgón que verificaba en Bonao, buscado para esos fines en el muelle de Santo Domingo por los miembros de la banda que enviaba cocaína camuflada en los rubros.
“Este agente, Carlos José Aquino Castillo, se prestaba para verificar los contenedores a destino violentando las normas internas, sin participárselo a sus superiores. Se tiene la convicción de que lo hacía conjuntamente con inspectores aduanales, pero eso lo arrojará la investigación que está en marcha”, expresa el comunicado de la DNCD.
La nota agrega que el mayor general Rolando Rosado Mateo, dijo que se trabaja en coordinación con las autoridades de Puerto Rico, entre ellas el Departamento Especial Antidrogas de los Estados Unidos (DEA), para lograr la captura de los responsables de recibir la cocaína enviada por los propietarios de la empresa “La Española Products, S. A.”, cuyo principal ejecutivo es el prófugo Euclides Suazo Rivas.
Suazo Rivas y su esposa, Rosanna María Gómez, estaban asociados en el país a un grupo de 5 hermanos, todos presos, acusados de empacar la cocaína en un centro de acopio que tenían en Bonao, desde donde realizaban los envíos al puerto de Santo Domingo para llevar la droga a Mayagüez, camuflada en batata y yautía. Lo hacían a través de Ferry y algunas veces en embarcaciones que zarpaban desde el Muelle de Haina.
El contacto en Puerto Rico era Iván Suazo Rivas, hermano de Euclides Suazo Rivas, quien tenía la responsabilidad de recibir los envíos de droga, de acuerdo a las explicaciones ofrecidas por Rosado Mateo. En el último año, esa banda envió 22 contenedores de yautías, batata y otros productos, por lo que no se descarta que en cada viaje llevaran cocaína, dijo.
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