jueves, 14 de enero de 2010

Estiman 100 mil muertos en Haití

Las calles se han convertido en el hogar obligado de cientos de miles de personas que todavía permanecían a la intemperie con sus escasos ajuares y en muchos lugares compartiendo espacios con los cadáveres, que habían empezado a descomponerse.

“Todavía hay muchos vivos en los escombros, porque no hay con qué sacarlos. No hay hospitales. Sacamos a la gente, pero no hay médicos que los atienda. Somos nosotros mismos, la Cruz Roja no da servicio”, dijo a El Caribe Kelly Pére, un conductor de un camión, que asegura haber transportado a decenas de muertos.

Las únicas autoridades que son identificables en la ciudad eran algunos miembros de la Minustah y policías haitianos. La ciudad no tiene energía ni comunicación.

No se observa las labores de ayuda anunciada, pese a que se vio penetrar por la frontera al menos 15 camiones y cocinas móviles del Gobierno dominicano. La situación se va tornando tétrica en la medida que se avanza desde la frontera.

En Font Paraisen vecina con Jimaní se perciben pocos daños, solo se ven paredes de casas en construcción derribadas, pero ya próximo a Puerto Príncipe, capital del devastado país, en Cafu Dasha quedaron edificios totalmente colapsados, como el Supermercado ABC, del que habían sacado ya 17 muertos y tres heridos y los vecinos presumían que todavía podían quedar algunos cadáveres.

Pero al acercarse por Cite Solei y Cuabosal el panorama es de terror. Decenas de familias enteras tiradas en las calles, entre una y otra, van los cadáveres de niños, adultos y ancianos, que aún a las 6:00 de la tarde no habían sido recogidos.

Ese panorama se repetía una cuadra tras otra en los barrios de Puerto Príncipe, donde los dolientes improvisaban catres y utilizaban carreterillas para cargar a sus muertos.

Los alrededores del Palacio Presidencial, que colapsó por completo, daban muestras de la situación de desprotección imperante en la nación. Alrededor de dos mil personas permanecían en un parque frente al edificio y otras cuatro mil en otra área de recreación cercana.

“Haití se partió y no queda nada. No tengo a dónde ir, perdí mi casa y mi familia”, se lamentaba Pichar Oradil, un joven de unos 20 años que merodeaba frente a la Casa Presidencial.

Las tantas personas en las calles testificaban no solo la cantidad de hogares que se perdieron con el temblor, sino además el temor de la población a quedar aplastada con nuevos episodios. De hecho en la tarde de ayer se produjeron al menos dos réplicas del movimiento telúrico, una a las 5:15 de la tarde y la otra a las 6:20. Las multitudes solo respondían con plegarias al Señor.

Otro aspecto de esta tragedia es el de salubridad, debido a que los cientos de cadáveres que quedaban en las vías comenzaban a descomponerse.

Los restos de unas 10 mujeres y niñas yacían en una acera apenas a dos calles del Palacio Presidencial, contigua al hospital general.

Perece el arzobispo de Puerto Príncipe

El arzobispo de Puerto Príncipe, monseñor Joseph Serge Miot, murió en el terremoto de Haití, dijo ayer un sacerdote católico en Francia.

El sacerdote Pierre Le Beller del Centro Misionero Saint Jacques en el oeste de Francia dijo que misioneros de su orden en Haití le dijeron que encontraron el cuerpo de Miot, de 63 años, en las ruinas de su oficina de la arquidiócesis.

Le Beller habló por teléfono con The Associated Press desde la ciudad de Landivisiau, en Bretaña. La orden de misioneros fue fundada por el año 1951 por el obispo de Gonaives, Haití, pero considera que su actividad misionera se inició en el año 1860.

Aunque tiene su sede central en Francia, mantiene una fuerte presencia en el país caribeño.

Gobernantes se pronuncian y hacen propuestas para socorrer a haití tras el desastre natural

Barack obama
Presidente EE.UU.

“Tenemos que estar con ellos en este momento de necesidad''. “Espero un esfuerzo de ayuda enérgico y bien coordinado. “Hemos movilizado recursos para asistir los esfuerzos de rescate. Los vuelos militares han evaluado los daños y enviamos el equipo de asistencia civil'', agregó.

Lula Da silva
Presidente Brasil

"Propuse al presidente Obama que Brasil está dispuesto a participar, junto a los EE.UU. y la ONU, en la coordinación de una reunión de países donantes para que se puedan agilizar los recursos necesarios para recuperar Haití". "Estoy profundamente consternado con la tragedia".

Gordon Brown
Ministro inglés

"Debido al devastador seísmo, Haití es centro del pensamiento y la solidaridad del mundo. El Gobierno responderá con ayuda de emergencia, con (el envío de) equipo de emergencia y (aporte) financiero". "Y vamos a dar más apoyo a fin de ayudar a la gente de Haití a recuperarse".

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