Este hombre, José Mar Flores Pereira, un boliviano de 44 años que lleva 17 residiendo en México, secuestró ayer un avión Boeing 737 que cubría la ruta Cancún-Ciudad México, con 104 pasajeros a bordo. Dijo que tenía tres cómplices para el secuestro, “el padre, el hijo y el espíritu santo”. Dio como razón que tenía que decirle al Presidente Felipe Calderón sobre un gran terremoto que azotaría a México. El secuestro terminó sin daños físicos para nadie.
MÉXICO. AFP. Un pastor boliviano que dijo actuar por inspiración divina secuestró el miércoles un avión de la empresa Aeroméxico que unía Cancún y Ciudad de México, en un incidente que duró más de una hora y concluyó sin víctimas en el aeropuerto de la capital, se informó oficialmente.
El secuestrador, quien portaba una Biblia, dijo a las autoridades que actuó por "una inspiración divina" ya que "había tenido una revelación de que México estaba ante un peligro, ante un terremoto", informó en rueda de prensa el ministro mexicano de Seguridad Pública, Genaro García Luna.
En un operativo relámpago, las fuerzas de seguridad tomaron el control y liberaron a los 104 pasajeros del vuelo 576 de Aeroméxico, que llegó en horas de la tarde al aeropuerto capitalino Benito Juárez tras haber partido desde el balneario internacional de Cancún, sobre el Caribe mexicano.
De nacionalidad boliviana.- El detenido, identificado como José Marc Flores Pereira, de 44 años, de nacionalidad boliviana y residente en México desde hace 17, explicó tras su arresto que su "inspiración divina" estaba relacionada con la fecha del 9 de septiembre de 2009, ya que si los números de "9-9-09 se colocan al revés es 6-6-6" (relacionado con el anticristo), añadió el secretario. Florez Pereira, quien habló luego con la prensa, dijo que con esta acción quería llamar la atención "para que nos unamos sin denominación, sin religión, para clamar por México". Continua Aqui
No hay comentarios:
Publicar un comentario