Serulle, alcalde electo de Santiago, se enfrentará al reparto de cargos entre el PRD y el PLD

Tras su derrota, el futuro político de José Enrique Sued en Santiago se vuelve incierto

SANTIAGO. La derrota de José Enrique Sued frente al candidato del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Gilberto Serulle, se convirtió en tema de debate entre dirigentes políticos y representantes de distintos sectores que auguran un futuro político sombrío y decadente para el actual alcalde, así como una gestión de retos para el funcionario que asumirá a partir del 16 de agosto.

A 11 días de las votaciones, también se discute sobre las posibles causas de la derrota de Sued, definido por su organización, el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), como su “buque insignia”. Desde que se hizo oficial el triunfo del PRD, se especula un presunto nombramiento del actual alcalde en el gobierno del presidente de la República y del oficialista Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Leonel Fernández, su aliado electoral. El funcionario edilicio asegura que selló con el mandatario un pacto que no acabó con las elecciones.

El triunfo de Giberto Serulle en Santiago se convirtió la victoria electoral más simbólica del PRD en los comicios.

Máximo Laureano/Clave Digital

Sued pidió al PLD que determine si su militancia desacató el llamado a apoyar sus aspiraciones, debido a que sólo recibió el apoyo de un 25% de los peledeístas.

Entre los aspectos que incidieron en la derrota Sued-PLD destaca el tema de la corrupción, tomado como bandera de campaña por Petrouska Muñoz, la actual vicealcaldesa y ex candidata a la Alcaldía por el Partido Dominicano por el Cambio (DxC).

“No es sólo los votos que sacó Petrouska Muñoz, sino cómo caló la campaña de la denuncia de corrupción en la clase media, que al ver todo esto se cuestionaba, ‘¿pero todo esto es verdad?’”, afirma el analista Juan Bonilla.

El también periodista expone que la derrota de Sued, su segunda en cinco eventos electorales, se basó en cuatro elementos: una mala asesoría, denuncias de corrupción, la traición de los peledeístas y la desidia de los dirigentes y militantes del PRSC.

Destaca que el presidente del PRSC, Carlos Morales Troncoso “nunca apoyó a su candidato de aquí en un mano a mano, ni en una caravana”.

Mientras, el presidente del Comité Municipal del PLD, Ramón Rodríguez (Monchi), entiende que su organización tiene muchos aspectos que debe evaluar, como consecuencia de los resultados de las pasadas elecciones.

LAS BATALLAS DE SUED

En la lucha desde 1970 Tras ser encargado de la entonces junta distrital de Licey Al Medio (1971-1973), diputado por la provincia de Santiago (1974-1978) y ocupar otras funciones públicas, José Enrique Sued ganó su primera sindicatura en 1994, con una votación de 88,900 votos obtenidos por el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC). En 1998 fracasó en su intento de reelegirse y fue derrotado por Héctor Grullón Moronta. En un largo debate interno en el PRD, en el año 2002, el reeleccionista, Grullón Moronta fue derrotado por Andrés Burgos, quien se convirtió en el candidato del PRD. Sued le ganó a Burgos con 34,976 votos del PRSC y sus aliados para un 44.61 %, contra 22,783 del PRD y sus aliados, equivalente a un 29.06 %. En el año 2006, Sued alcanzó la reelección con 129,929 votos para un 62 %, con el apoyo del PRD, que aportó 35,562 votos, equivalente a un 17.04 %.

Considera que, además de establecer las causas que dieron al traste con la candidatura municipal de la alianza en Santiago, también se hace necesario estudiar lo acontecido en los municipios de Puñal y Licey al Medio.

Señala como otro elemento a tomar en cuenta la alta votación que se produjo al nivel municipal, la cual interpreta como una expresión popular récord desde que la elección no se hace por el arrastre de la presidencial.

“Aún no tenemos una explicación de nada de esto, porque no hemos hecho la evaluación que acostumbra metodológicamente a hacer el partido en todos los niveles de dirección”, apunta.

Fraude. Serulle fue declarado ganador por la Junta Electoral de Santiago (JES) en el boletín número 18, emitido la noche del 17 de mayo, el mismo día que denunció una supuesta trama para desconocer su triunfo y que encabezó una caravana para defender su victoria.

“La noche del 16, si no voy a las 3:00 de la mañana a la Junta y voy dispuesto a echar la pelea en el terreno que sea, y si no movilizo el pueblo como se movilizó, demostrando que estaba con Gilberto Serulle, me hacen un fraude. Hoy no tuviese contando esta victoria electoral”, afirma.

Serulle obtuvo 110,748 votos (49.07 %), frente a 103,021 (45.64%) de Sued. El candidato al senado del PLD en Santiago, Julio César Valentín, logró una victoria con 57.30% (193,948 votos), frente a 38.22% (129,371) de Orlando Jorge Mera, del PRD.

Pero por su expulsión del PLD y su paso al PRD, Serulle se erigió en el protagonista político del momento, tras arrebatar al PRSC y al Gobierno una alcaldía que en los próximo 6 años manejaría entre 10 y 12 mil millones de pesos.

Serulle asegura que tuvo que desarticular un intento para hacerle fraude.

Máximo Laureano/Clave Digital

El ex peledeísta enfrenta ahora una de las tareas más difíciles de su vida política, debido al gran compromiso hecho con Santiago, ciudad que sostiene debe rescatar del abandono y la corrupción.

Desde el pacto con el PRD, prometió que el 40% de los puestos de la Alcaldía sería ocupado por la militancia de ese partido y un 40% por miembros del PLD. El restante 20% estaría contemplado por activistas de las organizaciones aliadas.

Este planteamiento de Serulle ha sido bien valorado por los sectores políticos locales. Sin embargo, se advierten diferencias entre los grupos, debido a que los empleos son distintos y a que la colocación del personal podría generar las primeras dificultades alrededor de la Alcaldía.

“Lo que me interesa es una gestión compartida, que vengan de todos los partidos, todos los hombres y mujeres que estemos interesados en rescatar a Santiago del abandono y de la falta de planes y proyectos”, alega Serulle.

Advierte que todo el que llegue al cabildo con su gestión debe ir a servir y “no a adueñarse del dinero del pueblo”. Asegura que, de lo contrario, será destituido y sometido a la justicia, sin importar el partido al que pertenezca.