martes, 27 de abril de 2010

Arreglistas defienden su trabajo

ALGUNOS EXPERTOS ATRIBUYEN A ESTOS EL ESTANCAMIENTO DEL MERENGUE Y SU DECLIVE
Boricuas. Los reguetoneros puertorriqueños han incursionado con éxito en el merengue desarrollando temas con fusiones interesantes.

Santo Domingo.- Los arreglistas no tienen culpa alguna del supuesto estancamiento por el que atraviesa el ritmo ni de la poca aceptación en el público, tal y como lo asegura el maestro Dioni Fernández.

Conocedores del género han expuesto que una de las problemáticas es que “los arreglistas se quedaron en los años 80”, dijo Joseph Cáceres en una publicación. Mientras que el músico e intérprete José Virgilio Peña Suazo considera que a veces sus colegas trabajan más para su propio ego y no para el gusto del público.

Respuesta
Dioni Fernández da respuesta a estas afirmaciones presentadas en un reportaje publicado en el día de ayer en esta misma sección, aclarando en primer lugar “que ningún arreglista hoy día hace arreglos de los 80 porque ya la mente no está en los años 80, sino en el 2000 y por más que uno quiera hacerlo no sucede. Uno siempre le pone algo diferente, tu le pides a Ramón Orlando un merengue de los 80 ahora y no te lo hace, por eso no comparto ese criterio”, sostuvo el músico, uno de los responsables de muchos éxitos en los años 80 y que sigue produciendo y arreglando todavía.

Una de las limitantes más grandes que confrontan hoy los arreglistas tiene que ver con la injerencia de los propios artistas en el trabajo que hacen estos, lo que en los años 80 no sucedía.

“El arreglista que viene trabajando del 97 para acá ha tenido ese problema, uno le hace el vestido y el traje y luego tiene que cambiarle la manga porque el producto no le gusta y el traje pierde la esencia. Antes se hacía completo el arreglo y luego se montaba la voz, ahora se hace un demo y luego se le hacen muchos cambios, a veces con razón y otras sin razón y uno tiene que mutilarlo, en base a las sugerencias del productor o del artista”, sostiene el músico.

Fernández hace una propuesta a los productores y merengueros: “si quizás los artistas y productores dejaran que los arreglistas y músicos hicieran las cosas como lo piensan, ahí está la magia. Frank Sinatra decía: la música la hacen los músicos”.

Leclerc opina
El joven arreglista Isaías Leclerc también coincide con las declaraciones del maestro Fernández, aunque aclara que en su caso Héctor Acosta, con quien trabaja y para quien hace la mayoría de sus arreglos, le permite trabajar con libertad. “Hay muchos casos en que los dueños de las orquestas son los que dicen lo que quieren”.

Leclerc trae otro punto a colación y se trata de la difusión y el apoyo de una disquera, poniendo como ejemplo la producción que le realizó a Rafely Rosario en un merengue con toques muy modernos y distinto a lo que hay en el mercado, pero “no había apoyo a nivel de inversión para difusión, lo que sí sucede por ejemplo con El Torito, que hace un buen trabajo y también tiene apoyo de una disquera”.

Considera que no son los arreglistas que tienen culpa alguna sobre la evolución del merengue si el artista quiere continuar con su línea de toda una vida. “Por ejemplo ya estamos trabajando con la nueva producción de El Torito y hay que escuchar los arreglos que estamos haciendo, totalmente distintos a lo que se ha hecho”, insiste el músico.

Mientras, el merengue sigue sonando en voz de los del patio y de otros que lo han acuñado con éxito.

Los boricuas
El maestro Víctor Wail, entiende que el merengue no se puede seguir ejecutando hoy día como en los años 80, porque “la juventud demanda los sonidos que ellos conocen, ellos aceptan esa música porque se sienten identificados” y es una de las cosas por lo que a su entender el público está conectado con el merengue que están haciendo los boricuas y extranjeros ahora.

“Sin esas fusiones el merengue se quedaría atrás como la plena y la bomba de Puerto Rico. Sin fusión el merengue iría a muchos menos lugares de los que está llegando hoy día, es necesario para el crecimiento del ritmo. Deberíamos darle gracias a los jóvenes que están fusionando para que el merengue siga creciendo”, sostiene Wail, uno de los productores que se ha empeñado en nutrir la música criolla con colores nuevos y refrescantes.

De igual manera Dioni Fernández valora y aplaude el trabajo que están haciendo los muchachos boricuas y del reguetón, como Tony Dize, Rakim y KenY y Tito El Bambino, entre muchos otros...Emelyn Baldera

No hay comentarios:

Publicar un comentario