Santo Domingo. Los investigadores del caso Figueroa Agosto determinaron que la droga que movían Manuel Emilio Mesa Beltré, alias "El Gringo" y Pascual Cordero Martínez, apodado "El Chino" en los barrios de la parte norte de la capital, pertenecía al prófugo narcotraficante José David Figueroa Agosto.
Aparentemente, la mercancía se distribuía de la siguiente manera, la droga se la enviaba el Cartel de Cali de Colombia y era bombardeada por la región Este del país en fincas y las aguas del mar Caribe.
Esta droga era recogida por Ramón Antonio del Rosario (Toño Leña), un tal "Pata de Palo" y Jesús Pascual Cabrera Ruiz, quienes se encargaban de guardarla, distribuirlas y ponerlas en los muelles por donde saldría del país.
Era aquí cuando entraban en acción los hermanos César y Miguel Starky García Coste y Joel Hernández Cuevas, quienes distribuían la mercancía a Beltré Mesa y Cordero Martínez, para llevarla a los puntos de expendios de la capital, especialmente en la parte norte.
Sobre este grupo, las autoridades tienen la tesis de que usaban el apartamento ubicado en el edificio Carola lV de Naco, como un centro de acopio y que lo tenían casi abandonado, visitando el lugar dos o tres veces por mes, y tras estallar la fuga de su líder, el boricua José David Figueroa Agosto, optaron por abandonarlo definitivamente.
En el caso de Jesús Pascual Cabrera Ruiz, éste está fichado por narcotráfico en los archivos de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), acusado de traficar con 1,007 kilos de cocaína.
Con relación a este caso, fue sometido a la justicia el 2 de febrero de 1998, mediante el oficio número OF-981182, junto a Camilo Pérez Diloné, alias "Bimbin" y Martín Cordero alias "Andrés".
Toño Leña, Pata de Palo y Jesús Pascual Cabrera Ruiz, son señalados por la DNCD como los responsables de la droga que entra por la región Este del País.
Los tres son buscados como "agujas" por los cuerpos de seguridad del Estado para someterlos a la justicia.
En el caso de Toño Leña, éste está acusado, entre otros delitos, de amenazar de muerte al presidente de la DNCD, mayor general Rolando Rosado Mateo y recientemente fue declarado prófugo y en rebeldía por una jueza de La Romana que lo citó y este no acudió. De Diario Libre
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