Un hombre sudafricano de 61 años fue asesinado por su esposa y sus hijos tras una discusión por querer presenciar el pasado domingo el partido de la Copa del Mundo entre Alemania y Australia, mientras que sus familiares querían presenciar un programa musical, informaron fuentes de la agencia local Sapa.
Los hechos tuvieron lugar al oeste de Polowkane, en la septentrional provincia de Limpopo, cerca de la frontera con Zimbabwe y Mozambique, cuando David Makweya quería ver el fútbol y su mujer Francina Makweya, de 58 años, su hijo John, de 36, y su hija Lebo, de 23, preferían otra oferta televisiva.
Los acusados han quedado en libertad a la espera de juicio, que se celebrará el 27 de julio, tras haber pagado cada uno de ellos unos 150 euros de fianza.
Sudáfrica ha establecido tribunales especiales para tratar asuntos de todo tipo relacionados con la Copa del Mundo, que adoptan sus resoluciones con suma rapidez, lo que contrasta con la demora habitual de las sentencias que se dictan en otros casos que se presentan en el país.
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