Miles de vehículos no superan la revisión que exige la ley 241-67.¿Caso omiso? Aunque la ley es igual para todos, las autoridades responsables de hacer cumplir la ley 241-67 ignoran a conductores que circulan por las calles sin la debida documentación. Esto incluye a vehículos de instituciones oficiales.
Cuando se aproxima la fecha de la “cuenta regresiva” del plazo que otorgan las autoridades para pagar los impuestos por concepto de renovación de placa o de la revista, siempre se repiten las mismas advertencias y amenazas: “No habrá prórroga”, “la AMET retendrá y multará a conductores de vehículos que circulan sin el documento” y “se pagarán 600 pesos de recargo, más 1,000 pesos de multa si el vehículo es retenido por la Autoridad Metropolitana del Transporte”.
Muchos conductores hacen largas filas para renovar placa. Sin embargo, de alguna forma, miles de conductores se las arreglan cada año para evadir la responsabilidad del pago del impuesto de la revista, que tiene un costo de RD$45.00. Con el marbete hay más rigidez, pero con la revista más flexibilidad.
Un agravante de esta situación es que la Policía Nacional ni la Autoridad Metropolitana del Transporte (AMET) intervienen cuando los vehículos que incurren en esas violaciones son propiedad de instituciones gubernamentales. Lo habitual es que circulen sin marbete ni revista. Los incumplimientos referentes al pago del derecho de circulación de vehículos están sujetos a las sanciones establecidas en el artículo 252 del Código Tributario.
Es un requisito de la Ley 241 -67 que para otorgar la revista a todo vehículo de motor que circule en el país, la Dirección General de Tránsito Terrestre debe someterlo cada año a una rigurosa revisión de sus condiciones físicas y mecánicas. Si se aplicara con rigurosidad la referida ley, el transporte público de pasajeros se quedaría sin guaguas “voladoras”, sin autobuses, sin carros del “concho” y casi sin taxis. Siempre se les recuerda a los conductores que además de los documentos que exige la ley, el vehículo debe estar en “perfecto funcionamiento”, con sus luces frontales, traseras y direccionales, limpia vidrios, neumáticos en buen estado, espejos retrovisores, sistema de luces operando adecuadamente, llevar botiquín de primeros auxilio “y otras exigencias”. Sin embargo, en las calles y avenidas circulan vehículos en tan malas condiciones que son auténticas bombas de tiempo. ¿Cómo lo hacen ante las narices de los agentes de AMET?
¿Cuántos vehículos de los casi 2.6 millones de unidades que tiene el parque vehicular de la República Dominicana cumplen los requisitos de ley, y cuántos superarían la revisión física y mecánica? Según la Dirección General de Impuestos Internos, el parque vehicular al finalizar el 2009 ascendió a 2, 570,220 unidades, de los cuales 645,258 son automóviles. 69,987 autobuses, 228,187 jeep, 331,120 de carga, 1,252,713 motocicletas, 17,269 volteos, 15,653 máquinas pesas y 10,042 que se clasifican como “otros”. Hasta el día 9 de este mes se había recaudado 583 millones por concepto de renovación del marbete.
Lo de siempre. La AMET siempre anuncia que, vencido el plazo, iniciará una batida contra los conductores que circulen sin el marbete o la revista. Esta amenaza es extensiva a quienes circulan con vehículos con cristales tintados. Otra advertencia va dirigida a los malandrines que venden revistas falsas en los alrededores de autoadornos, donde suelen operar.
Allí venden calcomanías hasta cuatro veces por encima de su valor oficial. Según la AMET, quienes sean sorprendidos en esa práctica, “son pasibles” de ser sometidos a la justicia.
Una advertencia adicional a los conductores que hablan por teléfonos celulares o “chatean” en sus modernos Blackberry mientras conducen.
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