SANTIAGO. Hace once días que el Comité Político del gubernamental Partido de la Liberación Dominicana (PLD) decidió apoyar la reelección del alcalde José Enrique Sued, del aliado Partido Reformista, pero el veterano político santiaguero se enfrenta a pesados obstáculos para poder dedicarse a la campaña por su reelección y ejercer el cargo por cuarta ocasión.
El principal problema de Sued es que está obligado a contar con el respaldo de los peledeístas, debido a que su partido, el Reformista, ha disminuido al nivel nacional hasta convertirse en una pequeña organización que obtuvo en los comicios de 2008 menos del 5 por ciento de los votos, quedando muy por debajo del PLD y del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), que dominan por mucho el mercado electoral.
El presidente dominicano Leonel Fernández, líder del Partido de la Liberación Dominicana, auspició el apoyo a la reelección de Sued. |
Roberto Guzmán/Clave Digital |
Otro obstáculo que se presenta contra Sued es que la Junta Central Electoral ha advertido que hará cumplir a todos los candidatos que ejercen funciones públicas la obligación de tomar una licencia mientras dure la campaña y hasta que concluyan las elecciones. En ausencia de Sued debía encargarse de la alcaldía la vice alcaldesa Petrouska Muñoz, que también está imposibilitada porque es candidata a alcaldesa por el partido Dominicanos por el Cambio.
Del "fraude colosal" al Frente Patriótico |
Los odios y los amores entre el PLD y el PRSC El 16 de mayo de 1990 el Partido de la Liberación Dominicana, que llevó como candidato presidencial a su líder fundador Juan Bosch, y el Partido Reformista Social Cristiano, que apostó a la reelección de su líder Joaquín Balaguer, a la sazón presidente de la República por quinta ocasión, se enfrentaron en unos comicios que las encuestas pronosticaron reñidos, aunque daban una ligera ventaja a los peledeístas. Los boletines de la Junta Central Electoral colocaron a la delantera al PLD y a Bosch, hasta el día siguiente, cuando comenzó un proceso de incremento del PRSC y Balaguer. En total, el PLD obtuvo 653 mil 272 votos y el PRSC 678 mil 065. El PLD denunció que el PRSC había cometido un “fraude colosal”, pero no pudo evitar que Balaguer fuera declarado ganador de los comicios. Se produjo entonces el mayor alejamiento entre el PLD y el PRSC. Incluso, Bosch devolvió una condecoración que le había concedido Balaguer por sus aportes a la literatura y a la historia, y le envió una carta en la cual se despedía con un “hasta nunca”. Leonel Fernández, un joven dirigente del PLD entonces, escribió el libro “Raíces de un poder usurpado”, en el que denunciaba el fraude cometido por el PRSC contra el PLD. En 1994, comenzó un proceso de acercamiento entre el PLD y el PRSC, que coincidieron en su oposición al PRD, y terminaron pactando el llamado Frente Patriótico que llevó a Leonel Fernández a ganar las elecciones de 1996. El presidente Fernández auspició el apoyo a Sued para candidato a síndico del PLD para los comicios de este año. Los peledeístas de Santiago y dirigentes del CP se opusieron. Euclides Gutiérrez calificó a Sued como “el peor síndico de todo el país”, y afirmó que apoyarlo sería un suicidio. |
Lo que representa la alcaldía de Santiago Con un presupuesto de unos RD$10 mil millones para los próximos seis años, lo que equivaldrá a más de mil 600 millones de pesos por cada año, el gobierno local de la Ciudad Corazón se ha convertido en una de las plazas más atractivas para los principales partidos políticos. Además de la posibilidad de hacer carrera política con base en una obra que genere apoyo popular, el político que administre la acaldía dispone de alrededor de tres mil plazas de trabajo, lo que le garantiza mantener la lealtad de sus seguidores, premiándolos con un nombramiento. No obstante, la alcaldía de Santiago arrastra una deuda que ronda los mil millones de pesos. Hasta enero del presente año había 16 aspirantes a alcalde de Santiago de los Caballeros. Por el Partido de la Liberación Dominicana aspiraban José Izquierdo, Hamlet Otáñez, Gilberto Serulle y Bienvenido Pérez. Por el Partido Revolucionario Dominicano aspiraban Próspero Jiménez, Radhamés Fermín, Héctor Grullón Moronta, Nelson Abreu, Héctor Domínguez, Andrés Santos Taveras, Ramón Filpo y Ramón Gómez. Por el movimiento Dominicanos por el Cambio aspiraba Petrouska Muñoz y Mateo Espaillat. Por el Movimiento Independencia, Unidad y Cambio aspiraba Aulio Collado Anico. Por el Partido Reformista Social Cristiano sólo aspiraba el actual alcalde y candidato José Enrique Sued. Fue síndico en el cuatrienio 1994-1998, perdió en 1998 para luego ganar en el 2002 y reelegirse con el apoyo del PRD en el año 2006. Para un nuevo período, promete la construcción de grandes obras. “Estamos trabajando en eso, son megaproyectos, grandes, millonarios y ese es el gran reto de mi próximos seis años”, expresó Sued. |
En el ambiente político de Santiago se comenta sobre un posible pacto PRD-PLD para denunciar la falta de transparencia y el nepotismo que han primado en la administración de Sued en el uso de los recursos del cabildo, lo que colocaría al candidato reformista en una situación muy incómoda frente al electorado.
Apatía y rechazo en el PLD. El médico y dirigente peledeísta Gilberto Serulle, que compitió con Sued por la candidatura y fue descartado al ser superado por el reformista en 2 de 3 encuestas de preferencias electorales encargadas por el Comité Político del PLD, fijó temprano su posicisión: respeta la decisión del PLD, pero no hará campaña.
De igual manera reaccionó Bienvenido Pérez, ex cónsul en Nueva York, quien advirtió que nadie puede obligarlo a cambiar de parecer. La dirigencia provincial y la municipal del PLD, lideradas por Ramón Ventura Camejo y Ramón Rodríguez (Monchy), respectivamente, no han emitido ninguna opinión oficial, a pesar de que aún horas antes de la decisión del Comité Político, los santiagueros mantenían un fuerte rechazo a la alianza.
Hasta el momento, la crítica más firme al acuerdo PLD-PRSC ha sido expresada por Julián Serulle, que expresó que triunfó el negocio por encima de la política. “Eso es algo que Santiago no puede agradecer, personas que ya llevan años y años en una posición y Santiago hoy es una ciudad paupérrima, es una ciudad sin un plan urbanístico, sin un plan de transporte y sin un concepto de planificación o de programa municipal”, manifestó Serulle.
Sued cauteloso. Mientras los dirigentes medios y de base se mantienen en perfil bajo en espera de decidir qué hacer en términos estratégicos y políticos, Sued intenta avanzar con suma cautela para no dañar más sus relaciones con el PLD, y se ha limitado por el momento a mantener contacto con votantes de los barrios más populosos de Santiago.
Con respecto al rechazo de los peledeístas, Sued ha adoptado la misma actitud que usa frente a las denuncias de corrupción en la alcaldía: ha guardado silencio y evitado el choque frontal.
Desde el litoral del PLD, sólo el candidato a senador, Julio César Valentín Jiminián, ha sido visto en algunas actividades de campaña a favor de Sued, bajo el entendido de que espera contar con los votos reformistas para sus aspiraciones.
Mientras tanto, Hamlet Otáñez, un hombre de la confianza del presidente Leonel Fernández, ha retomado su trabajo como director de la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan). Dijo que esperará el planteamiento de la dirigencia provincial. Otros, como José Izquierdo, ex candidato a síndico en 2006, se han mostrado cautelosamente optimistas, y esperan que la alianza con el PRSC fortalezca al PLD, aunque no se han integrado a la campaña electoral.
Por el momento Sued ha logrado el apoyo del presidente Fernández y de la cúpula del PLD, pero necesita de los votos peledeístas para ganar las elecciones.
Los rumores de que Gilberto Serulle y Miguel Vargas negociaban un pacto en virtud del cual el primero sería el candidato a alcalde del PRD y organizaciones populares, quedaron confirmados cuando se anunció formalmente el acuerdo. El domingo fue proclamado junto a los demás candidatos del PRD para Santiago, quedando sellada la salida definitiva de Gilberto Serulle del PLD, organización a la que se integró en los años 80, luego de una larga militancia en la izquierda marxista. Tanto para Serulle como para Sued, la suerte está echada.
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