Los Angeles Times. El cerrador de Seattle, Fernando
Rodney disparó una flecha al aire y cuando volvió a la tierra, todo el
mundo supo donde estaba: en una victoria para los Angelinos.
Rodney encendió las cosas el domingo después de sacar un out ante su
antiguo equipo, con un elevado al central de Kole Calhoun y celebró con
su fanfarria acostumbrada.
El problema es que era el octavo episodio, no el noveno.
La reacción de los Angelinos fue desde sorpresa “Rodney es Rodney”,
dijo Mike Trout con una sonrisa- hasta incomodidad “Fernando es un tipo
animado. Nuestros muchachos se dieron cuenta”, dijo Scioscia varias
veces.
Se dieron cuenta de verdad. Y le hicieron una mejor, de hecho, dos mejores.
Porque después que Trout abrió la entrada con un boleto y Albert
Pujols lo remolcó con un doble para empatar el juego, Trout y Pujols se
burlaron del gesto de Rodney, imitándolo ellos mismos.
Luego Grant Greene conectó un sencillo para empujar a Josh Hamilton, en la victoria 6-5.
Eso fue perfecto para Tyler Skaggs. Dijo que no había visto a Rodney con su rutina, pero no le gustó lo que oyó sobre la misma.
“Me alegra que hayamos anotado y ganado, porque eso es ridículo”,
dijo. “Eso le demuestra que no puede jugar con nuestro equipo, porque
tenemos muchos buenos jugadores, buenos bateadores”.
Pujols, por su lado, vio la movida de Rodney como algo de diversión y una confusión de su parte.
“Conozco a Rodney hace 15 años y cada vez que lo veía le decía que si
le pegaba un hit importante se lo iba a hacer. Por eso se rió. Esa es
su fiorma de ser”, dijo Pujols, quien añadió que hizo la seña hacia su
dugout, por diversión y no molesto con Rodney o los Marineros.
“Creo que pensó que estaba en el noveno porque eso lo decía la pizarra”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario