Santo Domingo.- Sergio Humberto Mota Reynoso (Vantroi), el hombre que la noche del pasado miércoles fue repatriado desde México, debió estar en la cárcel de donde fue regresado en el 2005 acusado de asesinar y causar heridas de balas a varias personas y de ser el líder de una banda que aterrorizó el sector Guachupita, en la parte alta de la ciudad capital.
Hasta el momento se desconoce cómo Mota Reynoso logró salir de la prisión a donde fue llevado el 15 de enero de 2005 cuando se entregó a la Policía después de una búsqueda de cinco meses.
Vantroi, como se le conoce en los sectores Los Pinos y La Fuente de Guachupita, en la capital, había escapado el 15 de agosto del 2004, cuando con un grupo de presos esperaba ser indultado luego de que asistieran a una misa en la iglesia de Nuestra Señora de la Paz en el Centro de los Héroes.
En ese momento se hizo pública la noticia de que el entonces presidente Hipólito Mejía se negaba a firmar el decreto concediendo los indultos que le había sometido el entonces procudador general Víctor Céspedes Martínez, por lo que un grupo decidió escaparse, entre ellos Vantroi.
Céspedes Martínez aseguró que no conocía a Vantroi, por lo que su indulto lo recomendó la comisión especial que se encargaba de evaluar los casos de los reclusos para favorecerlos con esa gracia presidencial.
Desde ese momento se convirtió en el “más buscado” del país, hasta que se entregó a través del Comité Dominicano de los Derechos Humanos, que dirige Virgilio Almánzar.
Matan su lugarteniente
El 10 de enero del 2005, una patrulla de la Policía dio muerte a tiros a Rigoberto Pineda Matos (Rigo), a quien acusaba de ser lugarteniente del fugitivo Mota Reynoso.
El hecho se produjo alrededor de las 8:00 en la avenida Enrique Jiménez Moya esquina Correa y Cidrón, del Centro de los Héroes, en medio de un fuego cruzado cuando Pineda Matos fue visto viajando un automóvil junto a Paulina Ramírez (Alba), quien fue apresada, y otros dos hombres solo identificados como Wilvin y Nelkis, que lograron escapar en medio del tiroteo.
En los días posteriores, patrullas policiales mataron, en distintos hechos y lugares, a Héctor Zarzuela Corporán (Liquito), de 18 años, “en un intercambio de disparos” en la avenida Francisco del Rosario Sánchez, otro identificado como Melvin, de 27 años, y a Canario, señalados cómo miembros de la banda de Reynoso Mota.
Los vecinos de Guachupita atribuían los continuos hechos de violencia en el sector a la rivalidad que existía entre el nombrado Eliezer Ramírez, el líder de una banda contraria, y Vantroi, por lo cual se disputaban los puntos de ventas de drogas y controlaban el microtráfico.
Cuando Vantroi se entregó, tras varios meses escondido en el barrio El Caliche de San Luís, acusó a Eliezer de ser el autor de la muerte de uno de sus hermanos.
“Eliezer es el culpable de todo eso. Todo esto es pago por Eliezer. Eliezer es uno que mató a un hermano mío”, gritaba el detenido a los periodistas en el patio frontal del Palacio de la Policía.
Su hermana, Yeni Reynoso, dijo que Eliezer fue “control” en la cárcel de La Victoria donde torturaba a Vantroi cuando estuvo preso.
LES ATRIBUYEN POR LO MENOS 36 ASESINATOS
ROSARIO DE MUERTES Y ACCIONES DELICTIVAS
La Policía informó ayer que los dos sicarios repatriados la noche del miércoles desde México, Joel Bautista Vásquez (Pilito) y Sergio Humberto Mota Reynoso (Vantroi), están acusados de manera directa en el país en 36 asesinatos y de ocasionar heridas a otras 15 personas, para un total de 51 víctimas.
De acuerdo con el informe policial los delincuentes lograron salir del país utilizando documentos falsos a nombres de Jeferson Núñez Tejada (Vantroi) y Tony Fernández Trinidad (Pilito), para tratar de evadir la persecución de las autoridades dominicanas, pero fueron capturados.
De acuerdo a los archivos, Pilito y la banda de la que formaba parte, asesinó a tiros a 19 personas y causó heridas del mismo tipo a otras nueve.
Mientras que Vantroi está directamente implicado en la muerte de 17 personas y en las heridas que presentan otras seis. Asimismo, figura sometido a la justicia en 16 ocasiones acusado de cometer asesinatos y otros delitos.
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