sábado, 11 de septiembre de 2010

Continúan azotando violadores y atracadores en el Mirador Sur


AYER CUANDO LOS REPORTEROS RECORRÍAN LA ZONA, UN HOMBRE DE 63 AÑOS FUE SALTADO
Rainier Maldonado
rainier.maldonado@listindiario.com
Santo Domingo

Minutos después de que lo atracaran ayer en el Parque Mirador Sur, visiblemente nervioso, un hombre de 63 años miraba indeciso el cuartel de la Policía que está en la avenida Anacaona, titubeando en si informar o no el robo del que había sido víctima.

Según contó, alrededor de las 11:50 de la mañana, a menos de 300 metros del destacamento, un joven delgado de piel clara, que se hacía pasar por un desyerbador, lo sorprendió y amenazó con un puñal de aproximadamente 24 centímetros.

Después de quitarle sus pertenencias, el atracador lo empujó y se le desgarró un tirante a su camiseta. Además, sus brazos y piernas se embarraron de lodo rojo cuando cayó al suelo.

Conmocionado, el hombre asaltado decidió no elevar la denuncia y para calmarse optó por seguir caminando hacia su casa. Al preguntársele si realizaría la denuncia, escéptico dijo: “Para qué poner la querella, aquí no se resuelve nada”.

Coincidencialmente el hecho ocurrió en momentos en que LISTÍN DIARIO monitoreaba el lugar para constatar las denuncias hechas por varios lectores de que en este parque los atracos y hechos delictivos son ahora más frecuentes.

El editorial de ayer de este diario alertó sobre el aumento de la delincuencia, incentivada por el descuido de la seguridad interna y por la falta de luz al caer la tarde y en las noches.

“Es oportuno que las autoridades se reúnan para revisar su sistema de seguridad interna y resuelvan, cuanto antes, intensificar la vigilancia para que no sigan produciéndose impunemente, ataques o atracos a ciudadanos”, indica el artículo de fondo.

Violaciones
Sospechosamente en las inmediaciones del kilómetro dos de la Avenida de la Salud –la otra vía que bordea el parque Mirador Sur– ocho piezas femeninas estaban tiradas sobre la grama. Todas se encontraban muy cerca entre sí. Entre ellas había un sostén, una falda desgarrada y dos pares de zapatos. Varios metros hacia delante, en dirección norte-sur, yacía colgada en un árbol una colcha para dormir.

En otro punto distinto del parque se encontró otra pieza femenina. Esta vez una camiseta desgarrada.

En relación a este panorama, el primero de octubre del 2009 reportes de prensa daban cuenta de que una mujer fue golpeada, violada y asesinada.

Su cuerpo sin vida fue luego arrojado en unos matorrales de la cercanía y descubierto 12 horas después.

Transeúntes consultadas ayer confirmaron que con frecuencia se enteran de que en las inmediaciones violan mujeres. No es para menos.

Taxistas consultados explicaron que como máximo se mantienen en la zona hasta la 7:00 de la noche, y que cuando reciben la llamada para asistir un servicio en el lugar lo aceptan con mucha suspicacia, después de ver quién es la persona que se va a montar en su vehículo.

Presencia policial
En el parque operan varios tipos de agentes de seguridad. Policías municipales cumplen servicios de 24 horas. También hay dos agentes de la Policía Turística con turnos desde las 6:30 de la mañana hasta las seis de la tarde, y finalmente, de la Policía Nacional.

LA DENUNCIA DE MIRNA PICHARDO
La comunicadora Mirna Pichardo informó que a principios de este mes, mientras caminaba por el Mirador Sur, un individuo sustrajo su cartera deportiva que se cuelga en la cintura cuando sale a caminar. El ladrón se llevó las llaves de su casa y el control del portón.

Consultados al respecto, agentes del destacamento que funciona a lo interno del parque explicaron que en la mañana de ayer atraparon a un individuo que respondía a la descripción: un individuo de tez oscura, que en el caso del apresado era de procedencia haitiana y responde al nombre de Junior Elicie. Según las autoridades, este hombre fue trasladado a la Fiscalía del Distrito. “La policía se descuida entre las 10:00 y las 4:00 de la tarde y no aparece ninguno por allí.

Se les ha dotado de carros de golf y de motores para realizar su trabajo ¿Cuántos de esos instrumentos están al servicio de la vigilancia? se preguntó Pichardo.

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