La excepción es el llamado centro histórico de Santiago, donde el servicio de energía eléctrica 24 horas funciona de manera satisfactoria
Los apagones no dan tregua en los diferentes barrios de Santiago, incluyendo en aquellos donde la electricidad está supuesta a permanecer durante las 24 horas del día. Las quejas por la crisis energética no cesan, tanto de parte de los comerciantes como de las amas de casa, quienes dicen que a pesar de los apagones las facturas llegan muy elevadas. La falta de electricidad afecta a los microempresarios, dueños de salones de belleza, tiendas de electrodomésticos, gimnasios, colmados y supermercados.
Los apagones no dan tregua en los diferentes barrios de esta ciudad, incluyendo en aquellos donde la electricidad está supuesta a permanecer durante las 24 horas del día.
Las quejas por la crisis energética no cesan, tanto de parte de los comerciantes como de las amas de casa, quienes denuncian que a pesar de los apagones las facturas llegan muy elevadas.
La falta de electricidad afecta a los microempresarios, dueños de salones de belleza, tiendas de electrodomésticos, gimnasios, además de colmados y supermercados que necesitan mantener productos refrigerados.
En los sectores de Los Pepines y el Ensanche Bolívar, por ejemplo, existe el acuerdo entre los residentes y la Empresa Distribuidora de Electricidad del Norte (Edenorte) para que el servicio eléctrico sea por 24 horas. Sin embargo, los moradores dicen que regularmente reciben cinco y siete horas menos de energía.
El presidente de la Asociación de Comerciantes de Muebles y Electrodomésticos del Cibao (ACOEMCI), Carlos Otero, dijo que como muestra de la crisis energética y la alta facturación decenas de negocios afiliados a esta entidad han quebrado.
“La energía es muy deficiente y además demasiado cara, lo que está castigando a los microempresarios”, manifestó el dirigente empresarial, miembro de la Asociación de Comerciantes e Industriales de Santiago (ACIS).
Otero llamó al Gobierno a mejorar el sistema eléctrico dominicano para que los pequeños y medianos comerciantes puedan subsistir.
Además de Los Pepines y el Ensanche Bolívar, la crisis en el sector eléctrico también se siente en el Ensanche Libertad, Pekín, Cristo Rey, Los Ciruelitos, Pueblo Nuevo, La Otra Banda, Nibaje, Valle Verde, Arroyo Hondo, Camboya, así como urbanizaciones y residenciales de clase media alta.
Antonio Rodríguez, propietario de un colmado en Los Pepines, dijo que la energía eléctrica no debería faltar ni siquiera por una hora en este sector, pues paga por un servicio de 24 horas.
Sostuvo que cuatro y cinco horas de apagones diarios están incluidas automáticamente en sus facturas, que religiosamente, debe pagar todos los meses.
“En el Ensanche Libertad la luz se va a cada momento pese a que estamos conectados en el servicio 24 horas”, según explicó la ama de casa Yajaira Capellán.
La excepción
El presidente de la Asociación de Tiendas del Centro Histórico, Carlos Lora, afirmó que el servicio de energía eléctrica 24 horas funciona satisfactoriamente en el centro de la ciudad.
Manifestó que la planta de emergencia que utilizaba en el pasado por los apagones tiene que arreglarla por falta de uso.
Las claves
1. Los sectores afectados
Los microempresarios, dueños de salones de belleza, tiendas de electrodomésticos y gimnasios, además de colmados y supermercados, son algunos de los sectores productivos que se ven más afectados por los cortes de la energía eléctrica en la ciudad de Santiago.
2. También en las casas
Las amas de casa también se quejan por las interrupciones. Dicen que, a pesar de que viven en sectores 24 horas y pagan la energía eléctrica, deben enfrentar largas interrupciones en el servicio.
3. Quieren subsistir
Para Carlos Otero, presidente de la Asociación de Comerciantes de Muebles y Electrodomésticos del Cibao (ACOEMCI), contar con la energía eléctrica es un asunto de subsistencia. Y es que, lamentó, a causa de la crisis energética y la alta facturación decenas de negocios afiliados a esta entidad han quebrado. Por ese motivo llamó al gobierno a resolver ese grave problema.
Escrito por: JOSE ALFREDO ESPINAL
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