LOS TRABAJOS SE EJECUTARÁN EN LA 27 CON GÓMEZ, TIRADENTES, LINCOLN Y CHURCHILL El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones también construirá soluciones viales para enfrentar el problema del tránsito que se origina de norte-sur en la capital.
El ministro de Obras Públicas, Víctor Díaz Rúa, explicó que esas soluciones ya están siendo diseñadas y se llamará a concurso para su construcción.
“Será en la Máximo Gómez, Tiradentes, Abraham Lincoln y Winston Churchill”, dijo el funcionario en entrevista para LISTÍN DIARIO.
El proyecto también incluye construir soluciones viales en la intersección de avenida 27 de Febrero y autopista Seis de Noviembre, en el lugar que la población llama “Pintura”.
En este punto se haría en varios sentidos, debido a que allí confluyen varias vías de la ciudad.
“Por esas intersecciones pasan alrededor de un millón de vehículos al día, que lo harían más rápido, sin semáforos. Eso quiere decir se arreglaría muchísimo el tránsito en la ciudad”, agregó.
Para facilitar el tránsito en ese sentido, Obras Públicas construye un puente elevado en la intersección de las avenidas Ortega y Gasset con 27 de Febrero, que ayudará a descongestionar el tránsito de vehículos en la Máximo Gómez.
También inició los trabajos de construcción de un túnel para giro a la izquierda en la avenida Ortega y Gasset, incluido dentro de las obras del Corredor Duarte.
El túnel de giro a la izquierda se extenderá desde la avenida Roberto Pastoriza con la Ortega y Gasset, hasta la Plaza Galerías Comerciales, en la avenida 27 de Febrero, con una longitud de 370 metros.
Este túnel junto con el elevado de 400 metros que se construye en la misma intersección, servirá de desahogo para las vías que allí convergen.
La obra está a cargo de la empresa Norberto Odebrecht, bajo la supervisión del ministerio de Obras Públicas, que a su vez contrató a la empresa supervisora Tecno América.
El presupuesto para construir el túnel está contenido dentro de la partida de los US$163 millones que se invierten en el Corredor Duarte, provenientes de un préstamo obtenido a través del Banco Nacional de Desenvolvimiento Económico y Social (BNDES), de Brasil.
En ese mismo lugar, Obras Públicas construirá otro túnel que irá desde la Ortega y Gasset hasta la avenida Santo Tomás de Aquino, en la Zona Universitaria.
La inauguración de la primera etapa del Metro de Santo Domingo por la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret), que mueve cada día miles de pasajeros, ha contribuido a la solución del tránsito en los sectores ubicados en la parte norte de la capital, cuyos habitantes tienen que moverse a sus centros de trabajos ubicados en el sur de la ciudad, como el Centro de los Héroes, o lugares de estudios, como la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
EL CORREDOR DUARTE Y SOLUCIÓN DEL PROBLEMA
El ingeniero Díaz Rúa informó que en breve tiempo serán inaugurados los puentes elevados que se construyen en las intersecciones de la avenida Jhon F. Kennedy con Núñez de Cáceres y Doctor Defilló.
Afirmó que los trabajos finales del llamado Corredor Duarte están listo para ser inaugurados el próximo año, lo que cambiaría por completo el tránsito vehicular de la ciudad.
El Corredor Duarte está conformado por los elevados de las avenidas Monumental con Autopista Duarte, Manoguayabo con Autopista Duarte, José Núñez de Cáceres con John F. Kennedy, Fernando Defilló con John F.
Kennedy, frente a Teleantillas.
También en la 27 de Febrero con Ortega Gasset y Carmen Mendoza de Cornielle.
Además, el elevado en la intersección de la avenida Charles de Gaulle con autopista de San Isidro, en la provincia Santo Domingo.
“Por esas intersecciones pasan un millón de vehículos todos los días, lo que va a permitir que podamos cruzar la 27 y la Kennedy, sin semáforos”, apuntó.
Reveló que la inversión total sería de unos 204 millones de dólares.
Díaz Rúa asegura que antes de que termine el actual período de gobierno del presidente Leonel Fernández quedará resuelto en problemas de los entaponamientos de la ciudad capital, significando un gran ahorro de dinero al país que tiene que comprar en dólares los combustibles de su parque vehicular. También significaría un gran ahorro de tiempo para los ciudadanos.
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