Según el informe presentado este viernes por los investigadores, Liriano Sánchez también estaba registrado en Estados Unidos por la comisión de distintos delitos, como robo, violencia doméstica y porte ilegal de arma de fuego.
Los investigadores obtuvieron el historial delictivo existente en el Departamento de Justicia Criminal de Massachusetts, Estados Unidos, contra el referido oficial superior, donde figura registrado en los años 1994, 1995 y 1998, por usar una placa falsa de vehículo, violación a la propiedad privada (robo agravado), asalto y agresión doméstica a su esposa y porte de arma de fuego sin licencia.
Los investigadores establecieron, además, que la red de sicarios y narcotraficantes tenía su centro de operación en La Romana, al servicio de quienes solicitaban sus servicios para asesinar y realizar cobros compulsivos.
Destaca que el oficial superior se reunía a menudo en su finca de la comunidad El Porquero, de San Cristóbal, con los integrantes de la red de sicarios y narcotraficantes, de la cual formaban parte los asesinados delincuentes Juan Félix Cordero Febles (Copelín) y Edgar Rijo Astacio (Maestrico).
La banda criminal, de la cual hay 13 miembros bajo arresto, era supuestamente dirigida por Salomón Eusebio Rosario, alias “Piki”, quien se encuentra prófugo, y es sindicado como un narcotraficante importante de la región este del país.
Se encuentran presos los sospechosos Lorenzo Guzmán, Francisco Reynoso Rodríguez (La Gata o Rubén), Miguel Saviñon, Máximo Javier Guerrero (Tito), Julio Alejandro Castillo, Jorge Alexander Mota, Alexander Aron Fulgencio, Francisco Antonio Luis Díaz, Efraín Febles Mercedes, Rafael Damaso, Jamyl Salomón Rosario, alias “Pikito”, el colombiano Henry Johany Gallego Cárdenas (El Paisa o El Sicario) y el haitiano Franklin Sorfa.
Del grupo fueron asesinados Cordero Febles (Copelín) y Rijo Astacio (Maestrico), en hechos violentos separados. En la escena donde lanzaron el cadáver de “Copelín”, en un cañaveral del ingenio CAEI, de Yaguate, San Cristóbal, fueron ultimados el sargento mayor policial Luis Méndez Sepúlveda y el chofer Abraham de los Santos Rodríguez.
Mientras que el posteriormente fue asesinado Rijo Astacio y su cadáver encontrado en las proximidades de Yaguate.
Los proyectiles encontrados en el colchón de la finca propiedad del teniente coronel Liriano Sánchez, quien alega haber vendido la finca, y los hallados en el lugar donde fueron encontrados los tres muertos en Yaguate, coinciden en sus características individuales, según comparación balística realizada por la Policía Científica.
Los investigadores establecieron, además, que la red de sicarios y narcotraficantes tenía su centro de operación en La Romana, al servicio de quienes solicitaban sus servicios para asesinar y realizar cobros compulsivos.
Se les atribuye haber materializado decenas de ejecuciones de reconocidos narcotraficantes y personas ligadas al bajo mundo, por razones de cobro de deuda o eliminación por ser piezas de testigos en procesos criminales.
Al grupo se le atribuye, además, haber ultimado a Juan Bartolomé Jasmín Febles (Lolo) y Rafael Ramírez, así como de causar heridas a Elpidio Antonio Ramírez (Cristian) y Elías Jiménez Vargas (Comando), al atacarlos a tiros el 10 de marzo del 2013 en el Car Wash Cutton, ubicado en la avenida Santa Rosa esquina Teófilo Hernández, de La Romana.
En el proceso investigativo, montado tras la muerte de “Copelín”, el sargento mayor Méndez Sepúlveda y el chofer De los Santos Rodríguez, se realizó un allanamiento al apartamento del referido teniente coronel Liriano, en el sector Evaristo Morales, del Distrito Nacional, donde se encontró entre otras evidencias, un contrato de venta de la finca donde fue asesinado “Copelín” de fecha 28 de junio del 2013, por un valor de 147,000 dólares a Lorenzo Guzmán Martínez.
De igual manera, en el proceso de investigación se comprobó que Guzmán Martínez es el chofer y coordinador de seguridad del presunto narcotraficante Eusebio Rosario (Piki).
Posteriormente, en allanamiento realizado en la casa de Guzmán Martínez, en el sector de Manganagua, de esta capital, se encontró un contrato de alquiler con fecha 29 de junio del 13, alquilando por 1,000 dólares mensuales a “Copelín” la citada finca.