viernes, 19 de abril de 2013

Policía mantiene cerco en busca de segundo sospechoso de atentados en Boston

AUTORIDADES EXTREMAN LAS PRECAUCIONES Y TIENen PREVISTO HACER UNA EXPLOSIÓN CONTROLADA EN UNA VIVIENDA 
 
EFE
Watertown
La Policía revisa hoy casa por casa el barrio de Watertown, al oeste de Boston, donde se cree que se oculta el segundo sospechoso de las bombas del maratón del lunes, identificado como Dzhokhar Tsarnaev, desde que escapó anoche de la persecución en la que murió el otro sospechoso, su hermano.
Los equipos especiales de búsqueda han cubierto entre el 60 y el 70 por ciento del área en la que creen que podría esconderse el fugitivo, según indicó en una rueda de prensa Timothy Alban, portavoz de la Policía Estatal de Massachusetts.
"No ha habido ninguna detención de momento", aclaró Alban, quien anunció además que la policía está extremando las precauciones y tiene previsto hacer una explosión controlada en una vivienda de la localidad cercana de Cambridge, mientras continúa peinando una extensa área a las afueras de Boston.
El Buró Federal de Investigaciones (FBI) confirmó que Dzhokhar Tsarnaev, de 19 años, es el segundo sospechoso buscado en relación con las bombas de la maratón de Boston del pasado lunes que causaron 3 muertos, entre ellos un niño de 8 años, y 176 heridos.
El cerco a Tsarnaev comenzó después de una persecución nocturna durante la que murió el otro sospechoso, su hermano Tamerlan, de 26 años. Ambos son de origen chechén.
Al parecer, los familiares entraron en EE.UU. como refugiados, pero Dzhokhar obtuvo hace un par de años la ciudadanía estadounidense.
El gobernador de Massachusetts, Deval Patrick, pidió a los ciudadanos de Boston que permanezcan en sus casas y no dejen entrar en sus viviendas a nadie que no sea un miembro de las fuerzas de seguridad claramente identificado, mientras continúa la búsqueda.
En el despliegue participan agentes de operaciones especiales SWAT (Special Weapons And Tactics) y agentes del grupo K-9, entrenados para el manejo de explosivos, según indicó el portavoz de la Policía del estado de Massachusetts, David Procopio, quien no descartó la posibilidad de que haya explosivos en la zona.
Ruslan Tsarni, tío de los sospechosos y residente en la localidad de Cambridge, pidió públicamente a su sobrino prófugo que se entregue y pida perdón a los familiares de las víctimas de las explosiones.
Tsarni señaló que hacía más de dos años que no veía a sus sobrinos y consideró que los hijos de su hermano "han avergonzado a su familia y a toda la etnia chechena". "Los chechenes son gente pacífica", agregó.
El familiar mencionó que es musulmán y enfatizó que él respeta a EE.UU. "Amo este país", dijo, porque "da una oportunidad a todo el mundo".
Las escuelas, universidades y los negocios permanecen cerrados y el servicio de transporte público ha sido interrumpido. La situación de toque de queda afecta a la ciudad de Boston y los barrios de Waltham, Newton, Belmont y Allston Brighton y Cambridge, un área donde viven 2 millones de personas.
El tráfico de taxis ha sido restaurado en Boston para permitir a quienes han ido a trabajar que puedan regresar a sus casas.
"No esperamos que nadie permanezca refugiado en sus lugares de trabajo", señaló Kurt Schwartz, de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA), quien señaló que no ha habido ningún cambio geográfico en la zona de búsqueda: "seguimos buscando en la misma área", afirmó.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se mantiene informado de la crisis, y se reunió esta mañana en la sala de emergencias ("Situation Room") de la Casa Blanca con el vicepresidente, Joseph Biden; el secretario de Justicia, Eric Holder; el director del FBI, Robert Mueller, y altos funcionarios responsables de la seguridad nacional.
 

Un sospechoso del atentado del maratón de Boston muerto y el otro cercado

AGENTES INICIARON BÚSQUEDA CASA A CASA Y PIDIERON A LOS VECINOS QUE SE MANTUVIERAN EN SU INTERIOR0
Tamerlan Tsarnaev, uno de los sospechosos que mató la policía.
EFE
Boston
El comisario de Policía de Boston, Ed Davis, confirmó que uno de los sospechosos del atentado de la maratón de la ciudad ha muerto, mientras que el segundo está huido y se le busca cerca de un centro comercial.
El asesinato de un agente de Policía del campus del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) desató una caza al hombre en la localidad de Watertown, al oeste de Boston.
Un espectacular despliegue policial con helicópteros, vehículos blindados de los equipos de intervención especial y centenares de agentes y decenas de coches patrullas logró acorralar a los dos perseguidos tras el tiroteo en el campus.
La malla policial evitó su fuga mientras los agentes repelieron con un intenso tiroteo los disparos y las bombas trampas que sembraban en la carrera los dos prófugos, según contaban los residentes a las televisiones y emisoras de radio.
El comisario Davis confirmó en rueda de prensa al alba que uno de los sospechosos del atentado de la maratón había muerto, mientras que el segundo continuaba huido y le situaba en las inmediaciones de un centro comercial de la localidad.
Según la información policial el fallecido era el sospechoso 1, tal y como fue identificado por el FBI, y que aparecía ataviado con una gorra negra y gafas de sol en las imágenes difundidas.
Su cómplice vestía una gorra blanca en las fotos policiales difundidas hoy.
Ambos habían robado un coche para huir del lugar del asesinato, según la investigación policial, que cuenta como excepcional testigo con el ocupante del coche que fue liberado ileso en una gasolinera donde colisionaron.
Allí fue donde resultó mortalmente alcanzado el sospechoso 1 y el cerco a su acompañante comenzó en el barrio residencial de Watertown donde los vecinos escucharon un tiroteo incesante que desató la alarma.
Los agentes iniciaron la búsqueda casa a casa y pidieron a los vecinos que se mantuvieran en su interior y alejados de las ventanas.
El tiroteo en el MIT tras un asalto a la tienda 24 horas del campus ocurrió a las 22.30 de la noche, apenas cinco horas después de que fuesen difundidas por el FBI las primeras fotos de los sospechosos de los atentados de la maratón del lunes en el que tres personas perdieron la vida y 176 resultaron heridas.
Al menos un agente del servicio de transportes público de Boston resultó herido de gravedad en la persecución de esta madrugada.
La Policía ha advertido de la peligrosidad del prófugo y mantiene el intenso despliegue policial en Boston, un día después de la visita del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y su esposa Michelle.
La mayoría de los 176 heridos por las dos bombas del lunes han sido dados de alta, aunque varias decenas siguen ingresados y al menos 13 han sufrido amputaciones graves.
En el hospital Beth Israel de Boston, donde fue confirmada la muerte de un hombre que encaja con la descripción de uno de los sospechosos de los atentados, hay actualmente ingresadas 12 víctimas de los atentados, una de ellas en estado grave.
Según explicaron los doctores en rueda de prensa, el fallecido llegó al hospital en parada cardiorrespiratoria con graves heridas de bala, quemaduras y heridas de metralla, lo que concuerda con las informaciones acerca de las explosiones ocurridas anoche.
"Tenía heridas que señalan algo más que disparos", informó a los medios uno de los doctores que estaban de guardia.
El paciente llegó con varios policías al hospital después de la 1 de la madrugada, hora local (5.00 GMT) y su muerte fue confirmada tras 20 minutos de intentos infructuosos por reanimarlo.
Los portavoces del hospital no quisieron revelar la identidad del fallecido, aunque sí que estuvo involucrado en la espectacular persecución policial de esta noche.
La búsqueda del sospechoso que permanece huido ha paralizado la actividad y hasta nuevo aviso ha sido suspendido el transporte del área metropolitana de Boston y ha sido decretado el toque de queda en la localidad de Watertown.
Las autoridades de la ciudad piden a la población que no intente acceder al transporte public, aunque mostraron su confianza en que poco a poco la situación pueda normalizarse.